Alicia en el País de las Maravillas

"Alicia empezaba ya a cansarse de estar sentada con su hermana a la orilla del río, sin tener nada que hacer: había echado un par de ojeadas al libro que su hermana estaba leyendo, pero no tenía dibujos ni diálogos. «¿Y de qué sirve un libro sin dibujos ni diálogos?», se preguntaba Alicia.

Así pues, estaba pensando (y pensar le costaba cierto esfuerzo, porque el calor del día la había dejado somnolienta y atontada) si el placer de tejer una guirnalda de margaritas la compensaría del trabajo de levantarse y coger las margaritas, cuando de pronto saltó cerca de ella un Conejo Blanco de ojos rosados.

No había nada muy extraordinario en esto, ni tampoco le pareció a Alicia muy extraño oír que el conejo se decía a sí mismo: «¡Dios mío! ¡Dios mío! ¡Voy a llegar tarde!» (Cuando pensó en ello después, decidió que, desde luego, hubiera debido sorprenderla mucho, pero en aquel momento le pareció lo más natural del mundo). Pero cuando el conejo se sacó un reloj de bolsillo del chaleco, lo miró y echó a correr, Alicia se levantó de un salto, porque comprendió de golpe que ella nunca había visto un conejo con chaleco, ni con reloj que sacarse de él, y, ardiendo de curiosidad, se puso a correr tras el conejo por la pradera, y llegó justo a tiempo para ver cómo se precipitaba en una madriguera que se abría al pie del seto.

Un momento más tarde, Alicia se metía también en la madriguera, sin pararse a considerar cómo se las arreglaría después para salir.

Al principio, la madriguera del conejo se extendía en línea recta como un túnel, y después torció bruscamente hacia abajo, tan bruscamente que Alicia no tuvo siquiera tiempo de pensar en detenerse y se encontró cayendo por lo que parecia un pozo muy profundo." 

Salvando las distancias, fue algo así lo que pasó conmigo.... De repente, irrumpió en mi vida la Carrera Docente (aunque al principio pensé que era yo la que elegía anotarme y comenzar este Camino), y aquí estamos... siguiendo al Conejo Blanco!! Dicen, los que saben, que ir tras el Conejo Blanco implica seguir ciegamente a alguien o algo, y esa persecución preanuncia aventuras y descubrimientos. De alguna manera, los libros sin dibujos ni diálogos son mis actuales prácticas docentes y en búsqueda de mejorarlas, es que voy tras el Conejo Blanco, en un profundo afán de descubrimientos. Y no sólo eso, ahora que empezamos con Tecnología educativa.... nos precipitamos por la Madriguera!!!!!! Al igual que Alicia, cuando empiezo estos recorridos alocados en mi vida, tampoco me pongo a pensar cómo salir del lugar al que me estoy metiendo.... Generalmente, dejo que el Camino me lleve y a fuerza de dejarme fluir, encuentro una salida llena de sorpresas y termino con mayores vivencias que las que hubiera podido soñar o intuir. Así las cosas, sigamos cayendo con Alicia por el pozo hacia la Madriguera, que la caída es larga pero no producirá ningún daño!!

El planteo de la materia, es en apariencia sencillo, pero estimo que sólo en apariencia. La idea es recorrer desde el campo de las nuevas tecnologías de la información y comunicación, parándonos en las distintas miradas de la sociedad, y analizar cómo es la transformación y la retroalimentación entre una y otra. El impacto y desarrollo de estas nuevas tecnologías en Educación, el análisis de las nuevas herramientas y sus consecuencias en la cotidianidad del aula. La evolución de los distintos materiales y herramientas, y cómo han impulsado el cambio social; el sentido crítico en el uso y búsqueda de información válida. La Web 2.0 y el aprendizaje colaborativo, entre los temas principales del programa. Para finalizar, con el desarrollo de un proyecto propio en base a todo lo trabajado y aprendido. Además, se analizará el rol docente, a lo largo de todo el recorrido.